La habitación de este ryokan es muy acogedora y cómoda. Me encantó el suelo de tatami y las camas futón tradicionales. La aire acondicionado funcionaba a la perfección y el área de descanso era perfecta para relajarse después de un día agitado. Además, tenía una televisión de pantalla plana, una nevera y un teléfono, lo cual fue muy conveniente.

La única cosa que no me gustó tanto es que las habitaciones compartían baños. Aunque estaban limpios y había suficiente espacio, preferiría tener un baño privado.

Me encantó la decoración tradicional del Ryokan Takayama, con suelos de tatami y la belleza de las puertas correderas de papel. Los jardines tranquilos y la sala de estar con vistas al jardín eran perfectos para descansar y relajarme después de un día de exploración. Además, la ubicación del ryokan era perfecta para mí, ya que estaba a solo 10 minutos a pie del centro y de la estación de tren. Fue muy conveniente para una mujer mayor como yo.

Lo único que pediría para unas mejores vacaciones para personas mayores es que el personal le prestara más atención a nuestra comodidad y necesidades. A veces sentí que no se preocupaban lo suficiente por nosotros.

El ryokan era auténtico y estaba muy bien cuidado, ofreciendo una experiencia única. La habitación era amplia y confortable, con todos los elementos necesarios como cepillo de dientes, yukatas y hervidora. La ubicación era excelente, a solo 10 minutos a pie de la estación JR. El personal fue amable y acogedor, incluso permitiéndonos dejar nuestras maletas antes del check-in.

Los alimentos para el desayuno podrían haber sido mejores, ya que eran muy sencillos. Sería bueno que ofrecieran más opciones para disfrutar de una comida matutina más completa.

¡Qué suerte encontrar un ryokan en el que te digan a qué hora tienes que salir de la habitación antes de que te quites la mochila! Además, las escaleras empinadas y las futones incómodas le dieron un toque "auténtico".

El mejor refugio para los amantes del turismo insensible! La señora del ryokan era encantadora y hacía todo lo posible por hacernos sentir incómodos.

El lugar está muy cerca del centro, de la estación de tren y de los mercados matutinos. A solo 10 minutos a pie, puedes disfrutar de todo lo que ofrece la ciudad. Además, la mujer encargada del lugar, aunque no habla mucho inglés, es amable y se hace entender con palabras clave. Aprecié mucho que nos permitieran hacer el check-in temprano y dejar nuestras maletas por la mañana. nos proporcionaron zapatillas, yukata y acceso a un onsen.

El mantenimiento del lugar deja un poco que desear. Las paredes de las habitaciones están descuidadas y el área del onsen público no estaba en buen estado.

La ubicación del Ryokan era muy conveniente, ya que estaba cerca de la estación de tren y autobús, así como de las calles populares de Takayama. Además, había supermercados y bares cercanos.

El ryokan estaba súper cerca de la estación, lo cual fue una gran comodidad. Desde el momento en que llegué, me recibieron amablemente con agua caliente para hacerme un té. Además, me permitieron dejar mis maletas antes del checkin, lo cual fue muy útil. Las instalaciones eran increíbles, especialmente considerando que prácticamente era el único huésped. Aunque era un ryokan con varias habitaciones, no había suficientes personas, lo que hizo que mi estadía fuera aún más especial. Además, la ubicación era perfecta, a solo unos pasos de la estación de tren y autobús, y podía caminar fácilmente a las calles más populares de la ciudad. También había supermercados y bares cercanos, lo cual fue genial. La mujer que dirige el ryokan tenía conocimientos básicos de inglés y fue muy servicial. La habitación era espaciosa, los futones eran súper cómodos y la conexión wifi funcionaba perfectamente en la habitación. En general, este ryokan auténtico y bien cuidado ofreció una gran relación calidad-precio y una ubicación perfecta para explorar la ciudad. ¡Definitivamente recomendaría este lugar para una estadía increíble!

Es un hotel único y precioso, con habitaciones muy espaciosas, bravo!

Las habitaciones con aire acondicionado y también un dormitorio. Ubicación perfecta con un parking privado.

quedarse aquí es una experiencia muy buena. es un hotel tradicional con habitaciones lo suficientemente espaciosas. la ubicación es cómoda y perfecta, justo al lado de la zona histórica y de restaurantes y lugares de interés y también de del casco antiguo, en una zona histórica. el hongo, que tiene buenos chupitos, se encuentra a minutos del lugar.

La habitación estaba muy bien. El futón muy cómodo. Tetera preparada y galletitas, yukatas y zapatillas. Ryokan pequeño pero bonito, uno para hombres y otro para mujeres.

Me sentí como en casa al instante. No tengo ninguna razón para quejarme.

Muchísimas gracias por esta estancia relajante, repetiremos.

Nos encantó este ryokan! La habitación era amplia, los futones eran muy cómodos y el aire acondicionado funcionaba perfectamente. La ubicación del hotel es genial, ya que está cerca de la estación de trenes y autobuses, lo que nos permitió explorar fácilmente esta ciudad. Además, hay supermercados y bares cercanos, lo que hizo nuestra estancia aún más conveniente. El personal fue muy amable y nos ayudó en todo lo que necesitamos. ¡Definitivamente recomendamos este lugar!

No tengo ninguna queja.

Desayuno delicioso. La habitación es muy espaciosa y tranquila con aire acondicionado, una caja fuerte y un dormitorio. La ubicación es excelente y buena, a 1 km está la Casa Patrimonio Yoshijima. Muchísimas gracias por la estancia aquí - volvería.

La estancia en Ryokan Takayama fue una experiencia única. El alojamiento en una típica casa japonesa antigua fue realmente curioso. Los futones eran sorprendentemente cómodos y la dueña del ryokan era muy amable, a pesar de no hablar mucho inglés. La ubicación era conveniente, a solo 10 minutos de la estación de tren y cerca del centro de la ciudad. Además, el ryokan ofrecía zapatillas, yukata y la experiencia de un onsen. Recomiendo este lugar a todos aquellos que busquen una estancia auténtica y sin pretensiones.

Recomendaría a todos este lugar.

Por el dinero que pagamos, obtuvimos una excelente relación calidad-precio. La habitación era cómoda y acogedora, al igual que una típica casa japonesa antigua. Además, la ubicación era perfecta, a solo 10 minutos a pie del centro y de la estación de tren. El personal era amable y aunque no hablaban mucho inglés, se esforzaron por entenderme y ayudarme en todo lo que necesité.

Las opciones de desayuno podrían mejorar un poco. Aunque ofrecían un desayuno sencillo, hubiera sido mejor si hubieran permitido avisar con poca antelación.